Volcán Santa María

El volcán Santa María de 3.772 m es un estratovolcán simétrico ubicado en la planicie costera del Pacífico de Guatemala. El volcán es cónico, pero tiene un cráter de ancho de 1.6 km en el costado suroeste debido a la erupción de 1902. Antes de esta erupción, Santa María estaba en estado latente durante cientos (o incluso miles) de años. La erupción comenzó el 24 de octubre y se prolongó durante 19 días, sin embargo, las explosiones más grandes se produjeron en los dos días después de la explosión inicial.

La erupción de 1902 devastó gran parte de Guatemala. Las piedras pómez cayeron sobre un área cerca de 105.000 millas cuadradas (273.000 kilómetros cuadrados) y se informó de que había llegado a lugares tan lejanos como California. Alrededor de 5.000 personas murieron como consecuencia de esta erupción.

Hoy en día, la mayoría de la actividad volcánica se lleva a cabo en el volcán Santiaguito, que está justo al lado. Santiaguito es en realidad un domo de lava que creció fuera del cráter de Santa María. Para el deleite de los viajeros, todavía arroja ceniza y lava regularmente.

El volcán Santa María es una de las excursiones más populares en la zona alrededor de Quetzaltenango. Subir este volcán es una forma divertida y gratificante de experimentar el paisaje de Guatemala.

El sendero comienza en el pueblo Llanos del Pinal. La caminata a la cima toma alrededor de 4 a 5 horas y pasa a través de prados verdes y bosques de pinos. Al acercarse a la cumbre, el sendero se vuelve en zigzag y la pendiente es más pronunciada. Usted sabrá que está cerca de la cumbre una vez que esté por encima de la línea de los árboles.

La vista desde la cima es espectacular. Usted puede mirar el cráter humeante del volcán Santiaguito, que por lo general erupciona varias veces cada hora. Si el cielo está despejado, usted también será capaz de observar el cono de ocho volcanes, incluyendo Acatenango, Fuego, Agua, Atitlán, San Pedro, Tolimán, Tajumulco y Tacaná. El amanecer es uno de los mejores momentos para estar en la cumbre, ya que es cuando está más claro.

Es seguro caminar en Santa María, sobre todo con el aumento de la presencia policial en los últimos años. Aun así, se recomienda ir con un guía. La señalización no siempre es evidente y la gente se ha perdido aquí antes.