Las montañas de occidente comienzan en la frontera con Costa Rica y se extienden cientos de kilómetros al este a lo largo de la Cordillera Central y la Cordillera de Talamanca. Incluyen dos parques nacionales (el Parque Nacional Volcán Barú y el Parque Internacional La Amistad), un volcán inactivo (Volcán Barú), y varios pintorescos pueblos de montaña. Las tierras altas de occidente tienen más bosque virgen que cualquier otra región en Panamá, y están repletos de todo tipo de plantas y animales; de los cuales algunos están en peligro de extinción o son endémicos. También es uno de los mejores lugares en las Américas para tratar de divisar al resplandeciente quetzal.

Uno de los destinos más populares es Boquete. Ha habido un gran aumento de interés en Boquete en los últimos años, y hoy en día la ciudad compite con Bocas del Toro por ser el destino más famoso de Panamá. Una vez que se aprecia este encantador y modesto pueblo de montaña se entenderá por qué.

Boquete yace en el lado sureste del Volcán Barú en un valle constituido por colinas verdes. Este pequeño y acogedor pueblo (con una población de 4.500) ha sido conocido y recordado por su café y sus naranjas, al igual que la feria anual de flores que atrae a miles de visitantes cada año. Comenzó a atraer atención extranjera a finales de los 90's, y desde entonces ha visto un flujo constante de viajeros, empresarios, y pensionados. Manteniendo su popularidad, se evidencia que Boquete ha hecho bien al mantener su encanto. Sus calles todavía son pequeñas y pulcras, y su paisaje natural es asombroso.

No hay muchas vistas desde el pueblo en sí, pero hay una amplia selección de cosas por hacer. Aquellos adictos a la adrenalina podrán recorrer el canopy más largo de Panamá, o ir a practicar rafting de aguas rápidas en el Río Chiriquí. Esta provincia es la zona agrícola más productiva del país, y hay varias plantaciones de café bordeando al pueblo. Estas no sólo ofrecen deliciosas y frescas tazas de café, pero también unas oportunidades de avistamiento de aves bastante buenas (en particular la Finca Lérida).

Boquete también es conocido por sus jardines privados excéntricos. Estos hermosos jardines combinan paisajes atractivos con estatuas peculiares, señales ingeniosas, y demás divertidos (aunque algo aleatorios) objetos. Son una forma genial para pasar la tarde caminando y sonriendo. Está de más decir que el senderismo en esta área es maravilloso, y hay varias caminatas naturales que los visitantes podrán hacer. Cerca del pueblo de Caldera encontrará un conglomerado de termales calientes que también podrá aprovechar.

El Volcán Barú, el punto más alto de Panamá con 3.475 metros de altura, domina el paisaje al noroeste de Boquete. Este volcán dormido es parte del parque aún más grande que lleva su nombre, el Parque Nacional Volcán Barú. El parque ofrece oportunidades sensacionales para practicar senderismo y acampar, con senderos que serpentean a través de un rango maravilloso de zonas de vida. Habrán varios tipos de bosques antes de llegar a la cumbre rocosa, donde en días claros, se pueden apreciar a la distancia el Caribe y el Pacífico.

El Parque Internacional La Amistad yace en el lado oeste del Volcán Barú. Este parque internacional de gran importancia se adentra en Costa Rica y yace a lo largo de la cordillera montañosa de Talamanca. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1990, las plantas y los animales del parque están entre los más diversos en Panamá. Un poco menos de la mitad del parque se encuentra en Costa Rica, dejando unas 207.000 hectáreas a lo largo del lado Panameño. Al igual que en el Parque Nacional Barú, los bosques varían muchísimo, desde tropical de tierras bajas hasta subalpinos. Se han identificado aproximadamente 600 especies de aves en el área, incluyendo al resplandeciente quetzal y al pájaro sombrilla cuellinudo, y cinco de las seis especies de felinos presentes en Centroamérica se pasean por el parque; el ocelote, puma, jaguar, jaguarundi, y el tigrillo/margay.

Hay senderos en buenas condiciones que lo llevarán a través de ambos parques nacionales, incluyendo el popular Sendero Los Quetzales, el cual serpentea alrededor de la base del Volcán Barú y conecta a Boquete con Cerro Punta.

El pequeño pueblo de Cerra Punta es tan pintoresco que parece ser ficticio. Un mosaico de zonas agrícolas verdes adornan los bordes de la calle que llevan al pueblo, con vacas lecheras pasteando a lo largo de las cercas y caballos de carreras galopando a través de los pastizales. Las montañas se elevan alrededor, y la neblina con frecuencia se asienta en sus cumbres. Cerro Punta es el mejor lugar para acceder al Parque Internacional La Amistad. Aparte de visitas al parque o caminatas a lo largo del Sendero Los Quetzales, los visitantes de Cerro Punta pueden disfrutar de tours de granjas de flores o fresas, y visitar la Finca Drácula, un jardín botánico que posee más de 2,000 especies de orquídeas.

Las tierras altas de occidente son mucho más frías que las tierras bajas. Las temperaturas podrían caer hasta 7°C (45°F), y podría ser más húmedo que otras partes del país. Incluso en la época seca, el área podría estar cubierta de bajareque, un término de los locales para referirse a una llovizna con neblina. Siendo este el caso, asegúrese de traer ropa caliente y para la lluvia, sin importar cuando vaya a visitar.

Gran parte de esta región es accesible a través de David, la segunda ciudad más grande de Panamá y el centro comercial y de transporte de la región. Construido al lado de la Carretera Interamericana, los buses y las rutas se ramifican desde David, así que la mayoría de visitantes pasarán al menos una tarde o noche en esta ciudad. Posee los servicios necesarios para reabastecer y recargar gasolina antes de dirigirse a su próximo destino.

El altiplano occidental ofrece a los viajeros un sabor diferente de Panamá. Si se encuentra en búsqueda de una exploración al aire libre estelar, y de un clima frío famoso, ha encontrado el indicado.