Chitré fue fundada en 1848, aunque los registros coloniales indican que pudo haber un pueblo aquí desde 1558, por lo que es uno de los lugares más antiguos conservados en Panamá.

Hoy en día, la ciudad es un lugar relativamente tranquilo. El centro de la ciudad tiene la mayoría de las tiendas y zonas comerciales, así como un pequeño museo y la catedral. La Catedral de Chitré, San Juan Bautista, fue construida entre 1896 y 1910, es un lugar atractivo para visitar donde el interior está decorado de una forma muy atractiva, con vidrieras, vigas de madera oscura y murales coloridos. Las personas locales entran y salen durante la tarde, utilizando la tranquilidad del interior para orar mientras toman un momento para respirar de las calles bulliciosas.

El Museo de Herrera es la galería pintoresca de Chitré, se encuentra en una esquina a pocas cuadras de distancia. Ubicado en un edificio español colonial bien conservado, este lugar ofrece una buena colección de hallazgos arqueológicos y exposiciones. La mayoría se dedica a la historia y la cultura de la provincia de Herrera, pero otros se entregan a las costumbres y tradiciones del país en general.

Chitré es un buen punto de partida para explorar algunas de las áreas vecinas, incluyendo la pequeña y bien conservada ciudad colonial española de Parita y la famosa ciudad de la cerámica de La Arena, los cuales están a sólo quince minutos. La Arena es reconocida a nivel nacional por su cerámica y sus calles están llenas de vendedores con cerámicas en todas sus formas, tamaños y colores. La atracción de Parita es su arquitectura española colonial y el encanto de la tranquilidad. No hay mucho que hacer en este sitio, pero es un lugar agradable para visitar por las tardes y tener una mejor idea de cómo se veía la península hace unos cien años.

El Parque Nacional Sarigua está 6 millas (10 km) al noroeste de Chitré. El parque fue devastado en la última década por la tala y quema de la agricultura, es ahora sólo un triste ejemplo de la deforestación tropical. Aquellos que buscan la diversidad de la belleza natural sería aconsejable que se mantengan alejados, o de lo contrario puede dirigirse al Refugio de Vida Silvestre Cenegón del Mangle, un refugio 776 hectáreas que cuenta con senderos (pasillo aéreo) de tablones que entrelazan los arboles de mangles y está lleno de garzas y caimanes.

Por supuesto, Chitré es el punto de partida para explorar el resto de la Península de Azuero, incluyendo los pueblos Las Tablas y Pedasí, algunas playas impresionantes y el refugio de vida silvestre Isla Iguana.

Los servicios para los visitantes de Chitré son extensos. En el pueblo hay hoteles, restaurantes, supermercados, bancos, cibercafés, farmacias, casinos, bares y un cine. Además, hay un centro de información turística CEFATI que puede proporcionar a los viajeros con información útil.