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Situado en uno de los viñedos más concurridos de Ica, el Hotel Viñas Quierolo está perfectamente ubicado para los viajeros que esperan para explorar la viña peruana. Los Andes bordean el valle de Ica, al este del hotel. Desde sus grandes ventanas, nunca te perderás los notables atardeceres que caen sobre las montañas.
Cuando esté listo para explorar el pueblo, la Plaza de Armas queda a 14 minutos en vehículo desde el hotel, está es la plaza principal de Ica. En la misma, asegúrese de tomarse una foto con los viejos árboles retorcidos que son anteriores a la llegada de los españoles. Sólo a una milla (1,6 km) de la plaza, pase por El Museo Regional de Ica. Este museo narra lo que poco se sabe de la gente antigua que una vez poblaron la zona, con muestras de cráneos, momias, textiles y cerámica descubiertos en el valle de Ica.
No importa lo lejos que estén de su casa, usted tendrá todo lo necesario para tomar un buen descanso durante su ocupado itinerario. Las camas están cubiertas con edredones de plumas para dormir la siesta. Todas las habitaciones cuentan con aire acondicionado, televisión de pantalla plana con cable y Wi-Fi. Puede enviar su ropa sucia al servicio de lavandería del hotel. Los dormitorios más grandes también están equipados con sus propias terrazas, que ofrecen una gran vista privada de algunos de los más variados paisajes del Perú.
Los espacios comunes y las habitaciones tienen paredes blancas, pisos de cerámica y detalles en madera. El hotel se presenta como una villa de lujo, diseñado para que los huéspedes que se sientan conectados con el pasado romántico de la viña.
¿Qué podría ser más refrescante que una piscina al aire libre, situada en el idílico paisaje Ica? El Hotel Viñas incluye un bar junto a la piscina, para que pueda disfrutar de un vino nuevo en este hermoso lugar. Los jardines del hotel han sido cultivados para mostrar lo mejor de la flora peruana. Tome un paseo maravilloso bajo la sombra de los árboles y así pueda respirar el aire floral.
Pruebe las opciones de lujo en el restaurante del hotel, acompañado por una botella de vino de la viña. Aquí la cocina peruana tradicional se transforma en la alta cocina de otro mundo en las manos de los chefs del hotel. Además de vino, no deje de probar el pisco, un popular aguardiente peruano a partir de uvas.
El Hotel Viñas Quierolo es un oasis en el desierto, pero está sólo una corta distancia de un oasis literalmente. Asegúrese de hacer tiempo para conducir unos 30 minutos a la gran atracción: el Oasis de Huacachina. A los turistas les encanta explorar la zona en buggies o practicar el sandboarding o ski de arena por una pendiente de arena.
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