Cuando usted piensa en las múltiples ruinas en Perú, es probable que usted primero piense en los monumentos de los Inca. Sin embargo, los Inca no fueron una población verdaderamente antigua; ellos se establecieron como la cultura dominante en Perú a lo largo de un poco menos de un siglo hasta la llegada de los españoles en el año 1532. Perú posee muchos estratos de civilizaciones humanas que se remontan hasta 12.000 años. Los expertos y los oficiales del gobierno estiman que existen alrededor de 100.000 sitios de gran importancia arqueológica en Perú. Aproximadamente 10.000 de estos sitios han sido excavados; aún hay mucho por descubrir.
Incluso en medio de la ciudad principal de Perú, Lima, los arqueólogos siguen encontrando artefactos de gran importancia escondidos a plena vista. En el año 2006, los arqueólogos descubrieron que un enorme montículo llamado Huaca Huantille funcionó como un montículo de sepultura para los Ichma, quienes habitaron Lima desde 1000 e.c. hasta 1400 e.c. Los indigentes habían estado usando el montículo como refugio por muchos años, probablemente inconscientes de los huesos que yacían dentro de las ruinas. Pero, un antiguo templo en medio de los modernos edificios citadinos no es nada nuevo para Lima. El Huaca Huantille se encuentra a 30 minutos hacia el este de dos de los templos más famosos de Lima, Huaca Pucllana y Huaca Huallamarca. Estos templos previos salieron de la civilización de Lima, la cual floreció desde 100 e.c. hasta 600 e.c.
En Perú, los arqueólogos deben competir en contra de una pujante comunidad de saqueadores de tumbas. Por más de 500 años, los campesinos que luchan por subsistir han utilizado su profundo conocimiento del terreno para la búsqueda de tumbas y revelar venas de oro antiguo. Los saqueadores de tumbas son conocidos como huaqueros, palabra derivada del Quechua para templo, huaca. Para hallar un sitio de sepultura, los saqueadores de tumbas a veces simplemente utilizan una lanza para punzar la tierra en busca de terreno hueco. Una vez que hayan encontrado una tumba, los huaqueros toman las joyas llamativas y dejan los huesos atrás. Afortunadamente, algunos avances en la tecnología han sido muy útiles en el esfuerzo por detener a los saqueadores. Últimamente se han utilizado drones desplegados para la vigilancia, controlando cuáles sitios han atraído excavaciones ilegales.
Asimismo, los sitios arqueológicos peruanos deben preocuparse por más cosas además de los saqueadores. En el 2013, los promotores inmobiliarios derribaron una pirámide conocida como El Paraíso, que se creía que se remonta a 4.000 años de antigüedad. En el mes de agosto del año 2014 se dio una destrucción similar con una pirámide llamada El Bosque, en la región de La República de Perú. De acuerdo al Ministerio de Cultura, estos desarrolladores realizaron endebles demandas del terreno para sacar ganancias de la cada vez mayor demanda por viviendas asequibles de Perú.
Los saqueadores se pueden enfrentar a una sentencia de hasta 8 años de cárcel, pero, la pobreza es un poderoso incentivo para huir con los antiguos tesoros bajo tierra. Conforme se pasee por las calles de Perú, particularmente cerca de una antigua ruina, permanezca atento de los comerciantes que le ofrecerán artifactos antiguos. Es muy probable que los mismos no sean reales; e incluso si lo fueran, es rotundamente ilegal comprar artefactos y posteriormente sacarlos del país.
Perú alberga algunas de las ciudades más viejas en el mundo. Esta lista le proporcionará una mejor idea de la gigantesca variedad de personas que reconocen a Perú como su hogar.
Inicie su exploración de la arqueología peruana donde todo comenzó. En el año 2008, los arqueólogos descubrieron esta ciudad de más de 5.500 años de antigüedad, cerca de un complejo de ruinas llamado Cerro Sechín. Este sitio contiene una de las primeras ciudades reconocidas en el mundo, lo que marca un importante hito en la civilización humana.
Sechín Bajo se ubica en el Valle de Casma (o, conocido simplemente como Casma), donde otras antiguas urbanizaciones, como Las Haldas, le han brindado a los investigadores una perspectiva única hacia el tipo de paisaje que le permitió a los antiguos peruanos a florecer. No se conoce mucho sobre los habitantes de estas ciudades, ya que los escombros de Sechín Bajo es todo lo que queda de su civilización.
Un consejo para los turistas: Sechín Bajo aún podría encontrarse bajo una profunda excavación para cuando llegue. Si este es el caso, Sechín Alto se encuentra a un corto viaje de 5 minutos en carro; este lugar es un complejo con forma de U construido alrededor de 1800 a.e.c. Además, en las cercanías usted también podrá encontrar el Museo Max Uhle, un sitio dedicado a las reconstrucciones de los murales ensangrentados encontrados en Cerro Sechín.
Ubicada a dos horas hacia el norte de Lima, Caral inicialmente llamó la atención de los arqueólogos en el año 1996. Utilizando la técnica de datación por carbono, los científicos han estimado que la edad de este sitio es de aproximadamente 5000 años. Antes del descubrimiento de Sechín Bajo, se creía que Caral conformaba la ciudad más antigua en Suramérica.
Aparte de su tremenda edad, visite Caral para apreciar las decrépitas pirámides y jardines circulares. Estos estilos arquitectónicos que fueron heredados de generación en generación han sido replicados por los peruanos a través de la historia del país.
Un consejo para los turistas: Usted necesitará un guía para apreciar las ruinas, disponibles a ser contratados en la entrada a los sitios. Estos guías con frecuencia serán estudiantes, y normalmente bastante baratos.
Los arqueólogos creen que el templo de Chavín de Huántar funcionó como un sitio de peregrinación. Es mejor conocido por sus múltiples relieves tallados de deidades felinas. Hay una amplia variedad de criaturas extrañas representadas en las paredes de este templo, incluyendo animales con rostros humanos.
Uno de los artefactos más famosos de este sitio, es el Obelisco Tello, el cual se encuentra en exhibición en el Museo Nacional de Arqueología e Historia en Lima. Está nombrado en honor a Julio C. Tello, el arqueólogo peruano que llamó la atención a este sitio en el año 1919, y alcanzó la reputación de ser el padre de la arqueología peruana.
Consejo para los turistas: Asegúrese de observar la serie de cámaras debajo de las ruinas. Tenga en mente que estas pueden encontrarse bastante congestionadas durante la tarde.
Usted con frecuencia escuchará que los Nazca son descritos como "misteriosos"; un pueblo misterioso que dejó atrás las extrañas Líneas de Nazca, y posteriormente desaparecieron sin explicación alguna.
Los principales sospechosos involucrados en la desaparición de los Nazca son los alienígenas del espacio exterior. Pero, un estudio reciente del Desierto de Nazca ofrece una explicación más concreta. Los Nazca cosecharon el árbol de haurango, un árbol con profundas raíces que ayudó a mantener la humedad del suelo. Hace 1500 años, cuando la población Nazca comenzó a disminuirse, el número de árboles de haurango en el área también se comenzaron a reducir. Sin estos árboles, el medio ambiente se tornó muy seco para apoyar efectivamente la vida humana. Este descubrimiento arqueológico ha sido citado en recientes discusiones sobre la preservación medioambiental moderna.
Un consejo para los turistas: Es un poco difícil lograr apreciar por completo las Líneas de Nazca desde la tierra, por lo que muchos turistas optan por apreciarlas desde un tour en avión.
Muchas civilizaciones se establecieron en la costa norte de Perú debido a la gigantesca variedad de mariscos disponibles. Aquí, la Corriente de Humboldt colisiona con unas cuantas corrientes de agua calientes del Pacífico, convirtiendo el lugar en un hábitat ideal para una amplia variedad de peces. Las ciudades norteñas de Perú de Trujillo, El Brujo, y Lambayeque son famosas por su esplendor arqueológico.
Esta época usualmente se le conoce como la Era Precolombina o Prehispánica, términos que describen con amplitud el tiempo previo a la llegada de los europeos.
Los Chimú continuaron las tradiciones artísticas y el lenguaje de los Moche. Ellos habitaron la parte norte de los Andes de Perú, en gran parte de lo que una vez fue territorio de los Moche. A partir del arte que dejaron atrás, sabemos que solían alabar la luna, a diferencia de los muchos cultos adoradores del sol del Perú Precolombino. En el siglo XV, ellos eventualmente cayeron ante los Inca.
Trujillo
Chan Chan, ubicado justo en las afueras de Trujillo, sirvió como la capital de la civilización Chimú. En cierto momento estuvo albergando aproximadamente 50.000 personas. Hoy en día, los turistas pueden visitar los nueve complejos reales, incluyendo los sitios de sepultura reales.
Gran parte de Chan Chan se ha erosionado debido a una serie de desastres. Los españoles tomaron muchos artefactos y las inundaciones provocadas por El Niño destruyeron gran parte de la estructura. Hágase de una idea del esplender original del sitio en el Complejo Tschudi, y aprecie el área restaurada de Chan Chan. Los visitantes podrán caminar a través del área ceremonial y el mausoleo, y todavía podrá ver algunos grabados en las paredes.
Un consejo para los turistas: Permanezca atento mientras camina a través del laberinto de túneles por si solo. Es recomendable que contrate uno de los asequibles guías ubicados en la entrada.
Mientras se encuentre en Lima, visite el Museo Larco para obtener una perspectiva general de la cultura pre-hispánica. Este museo alberga textiles, cerámicas, y artefactos de la cultura de los Moche, Wari, y Chimú.
El Rey Pachacutec posee el mérito de haber comenzado la expansión Inca desde su ciduad capital, Cusco. Eventualmente, los Inca alcanzaron el control de toda la costa de Perú, extendiéndose desde Ecuador hasta el norte de Chile, cubriendo un área total de aproximadamente 482.803 kilómetros cuadrados. Cuando los españoles llegaron en el año 1532, unas guerras civiles entre los Inca había debilitado a sus ejércitos. Eventualmente, un pequeño grupo de Incas nobles se retiraron hacia los Andes. Esta resistencia colapsó en el año 1572, después de que los españoles habían capturado y ejecutado al último emperador Inca, Túpac Amaru.
La Región de Cusco
Machu Picchu, a pesar de ser bien conocido y ampliamente investigado, aún contiene muchas preguntas sin responder para los arqueólogos. Más recientemente, los expertos en los Inca han identificado algunas de las estructuras en Machu Picchu como observatorios. Ellos dedujeron esto basándose en la posición de algunas de las ventanas, las cuales están configuradas de tal forma que permiten una perspectiva óptima de los solsticios.
El historiador Hiram Bingham llamó la atención del mundo hacia Machu Picchu en 1911. A pesar de que otros exploradores ya lo habían visto, fue Bingham el que reunió a trabajadores locales para limpiar el área de las plantas que bloqueaban el sitio y que obstruían la vista de muchos de los edificios.
A través del Valle Sagrado de los Incas, el epicentro de la civilización Inca, los arqueólogos han encontrado extensos ejemplos de las técnicas agrícolas de los Inca. En sitios como Wiñay Wayna, ubicado justo en las afueras del Camino Inca a Machu Picchu, largas hileras de terrazas agrícolas ocupan los lados de las verdes colinas. En estas terrazas, los arqueólogos están aprendiendo más sobre cómo los Inca lograron alimentar a su amplia población.
Algunos de los sitios arqueológicos más reveladores, como la fortaleza Inca de Sacsayhuamán, se agrupan alrededor de la ciudad de Cusco, la capital del Imperio Inca. En el año 2008, los arqueólogos descubrieron los restos de un templo ubicado afuera de Sacsayhuamán que exhibe rastros de civilizaciones Inca e incluso previas a los Inca.
Consejo para el visitante: El Camino Inca es impresionante, constituye la forma más escénica de llegar a Machu Picchu. Pero, si usted no está listo para realizar la caminata, el Tren de Machu Picchu o el Ferrocarril Inca ofrecen viajes alternos cómodos a través de las montañas hasta el sitio de interés.
Arequipa
Los arqueólogos no siempre desentierran sus descubrimientos. En la cumbre de Ampato en los Andes, en el sur de Perú, los arqueólogos Johann Reinhard se topó con la momia de una niña sacrificada, en reposo al lado de la montaña. Ella fue asesinada cuando tenía alrededor de 12 o 14 años, aproximadamente hace 500 años. Él la descubrió en 1996, un poco después de que el Volcán Sabancaya en las cercanías hizo erupción. Esta erupción derritió el hielo y la nieve de los alrededores, revelando el pequeño paquete de restos momificados. A ella se le llamó "Juanita".
Juanita vistió elaborados textiles de alta calidad. Los textiles y las cerámicas encontrados en la cercanía le proporcionó a los historiadores razones para creer que ella provenía de Cusco. Las condiciones de la montaña le permitieron a su cuerpo congelarse en seco, preservando su piel, su ADN, y sus órganos internos.
Después del descubrimiento de Juanita, una expedición regresó a Ampato para descubrir dos sepulturas sacrificatorias más de niños. Ellos fueron enterrados con figurinas de llamas y vasijas de agua, lo que sugiere que los sacrificios ayudarían a los Inca a alcanzar éxito agrícola. Muchas expediciones después, un total de 13 momias han sido descubiertas en el Cerro Ampato.
Un consejo para los turistas: YUsted podrá ver a Juanita en exhibición en Arequipa, en el Museo de Santuarios Andinos.
En las ciudades más animadas de Perú, como Lima, Cusco, y Arequipa, los arqueólogos siguen descubriendo las artesanías de personas que hace años desaparecieron. Por lo menos durante 12.000 años, los humanos en Perú han estado construyendo civilizaciones, desapareciendo, y comenzando una vez más. Explorando estos sitios y museos revelará un poco sobre lo que Perú debe contarnos sobre sus comienzos.
Sign up to receive the latest news and offers from Anywhere